El viaje a Perú tuvo un momento inesperado en el que tuve la oportunidad de acercarme a uno de esos raros animales que no es tan sencillo de ver: los manatíes del río Amazonas.
Estos tiernos y amigables animales pueden llegar a medir hasta 3 metros y pesar hasta 500 kilos. Hablamos del Trichechus inunguis o manatí del Amazonas, una de las cuatro especies de manatíes que hay en el mundo.
Su población va en descenso, siendo objeto de caza y de tráfico por lo que la tarea que realiza la Fundación Iquitos en este Centro de Rescate Amazónico es fundamental para su recuperación.
Está ubicada a unos 10 kilómetros de la ciudad de Iquitos (puedes llegar con el bus número 1 o llegar en un mototaxi en algo mas de 30 minutos por 12 soles aproximadamente). La Fundación se inició en el 2007 con el apoyo de Dallas World Aquarium, la asociación ACOBIA DWAZoo, y la Dirección Regional de Producción de Loreto.
Desde entonces, vienen rescantando y rehabilitando a estos tiernos mamíferos, junto con un programa de educación ambiental a la comunidad, factor clave para la conservación de la Amazonía.
Junto con los manatíes en vías de recuperación para volver a su medio natural (algunos rescatados de viviendas particulares), también pueden verse tortugas de río. Los visitantes pueden ver las tareas, son guiados por personal del equipo de biólogos que tratan a los animales y pueden dar de comer a los manatíes.
Ha sido una experiencia con mucha ternura, porque a pesar de ser animales tan voluminosos, tienen una mirada y una actitud amigable que te llega al corazón. Como verán en las fotos, no tienen dientes y les encanta la lechuga. Puedes tocarlos suavemente (su piel es tersa, como si tocaras un globo resbaladizo y algo desinflado).
Por supuesto, cada visitante puede dejar su aporte voluntario para que este equipo pueda seguir adelante con su tarea. Así lo hicimos.
Pueden ver todas las fotos de la visita en Flickr Viaje a Perú